Pelea La Buena Batalla

1 Tim. 6:12

Introducción:

A.     Hay muchos términos militares en el Nuevo Testamento: Fil. 2:25; Efes. 6:10-18; 2 Tim. 2:3, 4. Pablo pasó mucho tiempo en la compañía de soldados ro-manos.

B.     Es una figura muy adecuada. Nues­tra lucha espiritual es una guerra tremenda.

I. ¿Qué Clase De Batalla?

A. No física (de puños, pistolas, es­padas), Jn. 18:36; 2 Cor. 10:3-5; Efes. 6:12.

B.     La batalla de la fe, 1 Tim. 6:12; 1 Jn. 3:8.

C.     La primera batalla es el conflicto con uno mismo, como se ve en Mat. 16:24; 1 Cor. 9:27.

D.     Tenemos que combatir todas las fuerzas de la maldad, 2 Cor. 10:5.

E.      Debemos usar solamente las armas espirituales, Efes. 6:10-19; Rom. 1:16.

II. El Ejército Del Señor Es Un Ejército De Voluntarios Solamente, Mat. 11:28-30.

A.     ¿Quién está por Jehová? Ex. 32:26.

B.     Heme aquí, envíame a mí, Isa. 6:8.

C.     ¿Con qué propósito nos presenta­mos como soldados? 2 Tim. 2:4.

D.     Nadie es forzado a ser soldado, Jue­ces 7:3. Mejor 300 fieles que 32,000 que no está bien dedicados a la lucha.

III. Cristo Es Nuestro Comandante Per­fecto.

A.       El venció, Col. 2:15; Heb. 2:14, 15; Apoc. 3:21.

B.        Nos lleva a la victoria, 2 Cor. 2:14.

C.       Tiene recursos inagotables, 2 Cor. 9:8.

IV. Es Digno De Nuestra Sumisión.

A.     No enredarse con el mundo, 2 Tim. 2:4.

B.     Hay dos reinos opuestos, Mat. 12:30; 6:24; Col. 1:12, 13.

C.     Debemos reconocer y respetar la au­toridad de Cristo, Luc. 7:8; Mat. 28:18.

D.     Muchos quieren hacer lo que bien les parezca, Jueces 21:25.

E.      Pero un ejército victorioso es un ejército bien disciplinado, 1 Cor. 9:25.

V. Los Soldados De Jesús Deben Estar Dispuestos A Sufrir Por El, 2 Tim. 1:8; 2:3, 4.

A.     Antes de ingresar debemos calcular los gastos, Luc. 14:25-33.

B.     Podemos soportar todo si llevamos la armadura apropiada, Efes. 6:10-19.

C.     Es importante recordar el propósito del sufrimiento, Rom. 5:3-5.

VI. No Conviene Subestimar La Fuerza Del Enemigo.

A.       Conocer al enemigo para que no gane ventaja sobre nosotros, 2 Cor. 2:11; Efes. 6:11.

B.        El adversario es muy astuto, tiene muchas mañas, asechanzas. 1 Cor. 10:12.

C.       ¿Dónde y cuándo nos puede tentar? Tentó a Adán y Eva en el paraíso, Gén. 3; a Cristo en el desierto, Mat. 4:1-11; a los corintios en la iglesia, 2 Cor. 11:14; Sa­tanás siempre anda rodeando la tierra, Job 1:7.

VII. ¿Cuál Es Nuestra Mejor Defensa? Tomar La Ofensiva. Atacar.

A. Resistid al diablo, huirá de vosotros, Sant. 4:7.

1.    Si no lo hacemos, peleamos contra Dios, Mat. 12:30.

2.    Cristo pone el ejemplo, Mt. 12:28; 1 Jn. 3:8.

3.    Pablo también, Hech. 17:6; 19:19,

26.

B.        Debemos aborrecer el mal, Sal. 97:10; Rom. 12:9.

C.       Pelear con optimismo, con el propósito firme de ganar, 1 Cor. 15:58; Fil 1:12-14.

V1II. Somos Soldados En El Ejército de Jesús. El cristiano no pelea solo.

A.          Somos compañeros de milicia, Filemón 2. Cooperamos. Nos ayudamos unos a otros, como miembros del mismo cuerpo, 1 Cor. 12:14-27.

B.          El soldado cristiano no debe actuar como si fuera un Sansón.

C.          Debemos siempre cuidar de los heridos, Gál. 6:1, 2; Heb. 12:12, 13.

Conclusión:

A.     Usted, ¿contra quién pelea? ¿contra Satanás o contra Cristo?

B.     Seamos todos voluntarios en el ejército de Cristo, el ejército que será vic­torioso, Apoc. 17:14.