La salida de la tentación, 1 Cor. 10:13

I. El pueblo de Dios debe salir (huir, escapar) del mal y su consecuencia.

          A. Conforme al mandamiento de Dios Noé construyó el arca para que la gente pudiera escapar del diluvio, Gén 6:13, 14; Mat. 24:37-39. (1 Ped. 3:20, 21, "el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho, fueron salvadas por agua. El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva").

          B. Bajo la ley de Moisés se establecieron ciudades de refugio. "Os señalaréis ciudades de refugio, donde huya el homicida que hiriere a alguno de muerte sin intención. Y os serán aquellas ciudades para refugiarse del vengador", Núm. 35:11, 12.

          C. Los ángeles sacaron a Lot fuera de la casa y le dijeron, "Escapa por tu vida; no mires tras ti, ni pares en toda esta llanura; escapa al monte, no sea que perezcas".

          D. Moisés dijo, "Apartaos ahora de las tiendas de estos hombres impíos (Coré, Datán y Abiram), y no toquéis ninguna cosa suya, para que no perezcáis en todos sus pecados", Núm. 16:26.

          E. Pablo dijo, "Salid de en medio de ellos, y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os recibiré", 2 Cor. 6:17; "Huid de la fornicación", 1 Cor. 6:18; "huid de la idolatría", 1 Cor. 10:14; "Huye también de las pasiones juveniles", 2 Tim. 2:22.

II. ¿Cuál es la salida que Dios provee?

          A. La salida de la fornicación es el matrimonio, 1 Cor. 7:2.

          B. La salida de la tentación de desalentarse es la esperanza, Heb. 6:18; otra salida del desaliento es el trabajar, 1 Rey. 19:9-16.

          C. La salida de la tentación de mentir es decir la verdad, Efes. 4:25.

          D. La salida de la tentación de aborrecer es amar, Mt. 5:44, 45.

          E. La salida de la tentación de practicar la hechicería es poner toda la confianza en Dios, Fil. 4:6, 7; 1 Ped. 5:7.

          F. La salida de la tentación del genio fuerte es el dominio propio, 1 Cor. 9:27; 2 Ped. 1:16.

          G. La salida de la tentación de amargarse es el perdonar, Efes. 4:31-5:2.

          H. La salida de la tentación de ser carnal es ser espiritual, Gál. 5:16-24.

III. "Dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar", 1 Cor. 10:13.

          A. Es necesario saber Las Escrituras para poder citar textos cuando somos tentados, Mat. 4:4, 6, 10. Es necesario estar bien enterado de las salidas que Dios provee (como las salidas mencionadas arriba, bajo el punto II).

          B. También es muy necesaria la oración, Mat. 26:41.

          C. Otro requisito es el corazón puro, porque "cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido", Sant. 1:14; es decir, si tenemos malos pensamientos y malos deseos, si hay amargura, malicia, odio, envidia, etc. en el corazón, entonces fácilmente el diablo nos llevará a cometer toda clase de pecado.